No creo en dioses, ni en lo que algunos llaman combustión espontánea, pero si existieran, si cupiera la mínima posibilidad de que ambos existiesen, rezaría con todas mis fuerzas para que a los culpables de esta atrocidad les reventara un volcán en lo más profundo de sus entrañas y se calcinaran sus órganos lentamente, de dentro a fuera, hasta que les arda la piel, hasta que los envuelvan las llamas, hasta que el fuego se convierta en el último y agónico aliento de sus miserables vidas.
Hijos de puta.
Hijos de puta.
Fotografía: AcfiPress
7 Comentarios:
Totalmente de acuerdo. Que les caiga un rayo encima y desaparezcan de la tierra.
No son dignos de absolutamente nada mas que no sea el mayor de los desprecios y ojala desparezcan de la faz de la tierra!!!
Estoy de acuerdo también, no les gusta el fuego, pues que se quemen a lo Bonzo. Un saludo
Creo que este es un post no muy oportuno y desmedido.
Y que les duela mucho.
Pues yo creo que te has quedado corto :-)
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