martes, 11 de diciembre de 2007

Tipos de jefes.

Hace algún tiempo hice un análisis bastante personal y subjetivo de los distintos tipos de empleados que te puedes encontrar currando en cualquier empresa de herencia en este país. A raíz de un comentario, tenía pendiente hacer lo mismo con los que dan las órdenes. Aprovechando que en estas fechas las ideas andan casi tan justas como el bolsillo, creo que ha llegado el momento de desenmascarar al otro bando.

Si eres asalariado, mileurista, currante, explotado, mancebo, obrero, esclavo o como quiera que te guste llamarte en tus ratos de euforia sindical y quieres ahorrarte más de una sorpresa cuando acabe tu precario contrato de prácticas, presta mucha atención.

1. El protector. Lo reconocerás desde tu primer día de trabajo, puede incluso que en la misma entrevista si resultas ser tú el que andaba buscando. Lo primero que hará será rodearte los hombros con su brazo mientras tranquiliza tus nervios con palabras de aliento. Se mostrará entusiasta con tus progresos e ignorará tus fracasos, conviertiéndote enseguida en su mano derecha. Te mimará hasta el punto de convertirte en el punto de mira del resto de empleados, en el tema central de sus cuchicheos. Te convertirá en "el nuevo". Pero esto no durará mucho. En el momento que más cómodo te sientas, que más consentido te tenga, tu jefe te abandonará a tu suerte en la arena, entre las fieras. Pronto quedarás relegado al oscuro rincón donde te criticaban los demás a tus espaldas y observarás horrorizado como aquel brazo protector rodea los hombros de "el nuevo".

2. El simpático. O el lobo escondido en una piel de cordero. Desde el mismo momento en que entra en al oficina, una sonrisa de oreja a oreja se dibuja en su cara. Saluda efusivamente a todos sus subordinados, interesándose por la salud de sus esposas y sus maridos, sus padres y sus madres, sus hijos y sus hijas; comentando las mejores jugadas del partido que echaron la noche anterior en la tele. Es un individuo que cae bien por defecto, alguien a quien puedes mirar a los ojos mientras mantienes una conversación en el desayuno, alguien que no perderá una oportunidad de invitarte a unas cañas al salir del trabajo, alguien, en definitiva, en quien confiar. Y lo peor es que terminas confiando. Si lo haces, prepara tu espalda para la puñalada y vete rellenando los papeles del paro.

3. El cobarde. Este es un impresentable que anda siempre de acá para allá poniéndote a parir, llamándote vago a tus espaldas, contándole miserias a los dueños de la empresa en las cenas que organiza el fin de semana para untarse el culo de baselina. Pero no los tiene. No tiene cojones de decírtelo a la cara. Cuando cometes un error, se calla. Cuando le preguntas qué es lo que has hecho mal, no te responde. Se lo guarda en su cabeza transtornada por una triste infancia para soltarlo luego a los cuatro vientos. Cuando ya es demasiado tarde, cuando encuentras sobre tu mesa la carta de despido y decides ir a hablar con él, mira para otro lado. Todos conocen la razón de tu despido.. todos menos tú.

4. El incomunicativo. Similar al cobarde salvo en que no le cuenta nada a nadie. No te ayuda cuando tienes un problema. No te da consejo. No propone cursos de formación. No te da una palmadita en la espalda ni te grita desde su despacho. Te despide y punto. Nadie se enterará jamás de sus motivos.

5. El estresado. Ninguna otra persona en este planeta tiene tanto trabajo como él. Ni los demás jefes, ni los ejecutivos, ni los inversores, ni la directiva. Nadie. No le gusta delegar. Está tan preocupado por su propio trabajo que termina descuidando su plantilla. Quizás sea el mejor que te puede tocar, así podrás pasar muchas horas perdiendo el tiempo en internet y ni se enterará. Con tanto trabajo algún día cometerá un error y terminarán despidíendolo a él, así que lo mejor es que sigas leyendo.

6. El moderno. Este es una especie rara, difícil de encontrar, de la nueva escuela, recién salido de la facultad y con un millón de masters en metodología empresarial a sus espaldas. No dicta órdenes, no echa broncas, no ridiculiza, no grita, somete a votación justa y democrática cualquier decisión que te afecte, cualquiera salvo una: tu despido. En la cola del paro descubrirás que era sólo apariencia, un raído disfraz de snob que enmascara sus ansias de poder.

7. El cabrón. El peor de todos sin duda. Es un tirano, un cacique que disfruta de su propio poder que usa sin piedad para hundir tu carrera desde el mismo momento en que comienza. Le llevarás el café mientras él te convierte en escoria ante los demás, le harás los apaños de su casa después de haberte gritado treinta veces en un mismo día, lo llevarás al campo de golf cuando su coche esté en el taller para luego ser víctima de su despotismo. Jamás llegues tarde a tu puesto de trabajo, jamás discutas una orden suya, jamás intentes aparentar que sabes más que él o conocerás la ira y la venganza de primera mano. Es un cabrón con todas la letras y si te lo tropiezas, más te vale ir presentando la carta de dimisión antes de que él acabe contigo.

Puede que alguien eche en falta un 'jefe ideal' dentro de esta clasificación. Siento ser yo el que a estas alturas tenga que abrirle los ojos, pero no viene mal que sepa que los reyes magos y el ratoncito pérez tampoco existen.


También te puede interesar:

Tipos de empleados

El señor V


13 Comentarios:

lupuscanis on 12/11/2007 8:56 a. m. dijo...

Muy bueno e instructivo el post, como el de los empleados. Un saludo

Carlos Fernández San Millán on 12/11/2007 10:47 a. m. dijo...

Je, je, je ... muy bueno si señor. Lo he compartido en mi Reader y te he puesto una estrella. Me has arrancado unas risillas.

Un saludo.
---------
Carlos Fernández San Millán
Todos + 1 = 1 más
El Rincón del Triatleta Canario

Miguel Mora on 12/11/2007 11:53 a. m. dijo...

Gracias por esa estrella Carlos, sea lo que sea que signifique :)

Pedro Domingo Herrera on 12/11/2007 11:57 a. m. dijo...

El jefe ideal no existe? No jodas! Y a mi que me habían dicho que estaba de vacaciones en el lago Ness junto con Papa Noe de visita a Nessie? Vaya palo que me has dado! ;)
Un jefe siempre sera un jefe, y su único objetivo es su propia supervivencia y el servilismo hacia la empresa

Carlos Fernández San Millán on 12/11/2007 1:21 p. m. dijo...

Miguel, significa que hago tu entrada pública y relevante.

Un saludo,
---------
Carlos Fernández San Millán
Todos + 1 = 1 más
El Rincón del Triatleta Canario

Pejeverde on 12/11/2007 6:47 p. m. dijo...

Insuperable post.

Estimado señor, es usted el puto amo.

Yo añadiría un matiz porculizante. Las combinaciones.

Ahora mismo me estaba acordando de uno, que en un alarde de sofisticación, desarrolla simultáneamente dos roles "El Cobarde Estresado".

Un tío curioso, además era un Homosexual Homofóbico, estaba en todo, un pedazo de renacentista, diría yo.

Rafael Pazos on 12/12/2007 12:37 p. m. dijo...

Te la has currado, sonará a evidente porque ya sabes de lo que escribo, pero esta es una de las entradas que más me ha gustado de las que te he leído y suelo hacerlo.

Al menos, afortunadamente el mundo parece que avanza hacia más jefes "modernos", "protectores" y "simpáticos" y menos "incomunicativos", "cobardes" y "cabrones" que se van extinguiendo como dinosaurios.

Creo que no hay más "tutia", en definitiva el 96% de las empresas digamos que de ahora en día, no tienen apenas empleados, ni recursos para contratarlos y el 81%y creciendo, de los empleos lo generan esas empresas.

Tendrán que cuidarse mutuamente para sobrevivir, digo yo.

Y si encima, que la inmensa mayoría de los empleos son en empresas de menos de 10, que los jefes puedan permitirse acceder a empleados muy currantes y poco patosos. Formados... es que si no tienen al menos una sonrisa en la boca, a los empleados ni los huelen.

Hay que ser un jefe idiota (otra categoría) para obviar que el mundo cambia rápido con esto de la era del conocimento (le representa muy bien tu blog) y aquellos que se anclan en que los empleados no pueden elegir donde y como quieren trabajar... creo que son idiotas.

Un saludo

Anónimo dijo...

Pejeverde, el puto amo es cualquiera de los de las categorías que hablamos. Yo soy el puto esclavo.

Rafael, "dinosaurios" quedan. Yo tengo uno metido en un despacho muy cerquita. Debe ser de antes del pleistoceno porque esta misma mañana estaba hablando de despedir a dos de mis compañeras (de lo mejorcito que visto trabajando) porque no pueden asistir a la comida de navidad que se celebra un día no laboral por tener un bautizo de un familiar muy cercano. Para él, el empleado se debe a la empresa, ante todo y pese a todo y "no puede ser que hagan lo que les de la gana".

El problema es que desgraciadamente el mercado laboral está muy dificil, los bolsillos muy vacíos y los trabajadores muchas veces tienen que tragar todo lo que les llegue. Si no llegas a fin de mes con un sueldo, el paro no te da ni para la leche. Y buscar otro empleo es una decisión arriesgada, pasar de un indefinido a un tres meses de prueba da mucho miedo cuando el banco te tiene cogido por los huevos.

En cualquier caso, me ha gustado tu comentario. Ojalá otros pensarán así.

Gustavo on 12/12/2007 11:27 p. m. dijo...

No se si estás al tanto de mi nueva emprendedura empresarial...

Bueno, el caso es que he pasado de ser un asalariado a ser un jefe...je je...

Y la verdad, las cosas se ven de otro color cuando estás al otro lado, aunque intentaré no olvidarme de mis raíces proletarias...cosa harto dificil...

En fin...déjate ver por el negocio.
;-)

Salud!

Ricardo on 12/13/2007 9:04 a. m. dijo...

¡Madre mía, cuanto debes haber sufrido con tus jefes! Se ve que yo tengo suerte (más o menos)

Miguel Mora on 12/13/2007 12:12 p. m. dijo...

Gustavo, no lo sabía. Espero que tengas mucha suerte, ya pasaré a hacerte una visita. Si necesitas un administrador de sistemas, un guionista, un redactor o cualquier otra cosa, contrátame para ponerte a parir aquí. ;)

sb on 12/13/2007 1:31 p. m. dijo...

joder, el caso es que no hay uno bueno ;)

Anónimo dijo...

esas pinches pendejadas ke .estaba buscando una tarea de esto y me encuentro con estas mamadas pinches estupideses pues chinjga tu madre wey

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

RSS

Recibe las novedades en tu E-Mail:

o suscríbete al RSS con tu Lector de Feeds habitual

 

Los números

Top Blogs canarias

Look Closer Copyleft © 2006 | Plantilla modificada por Miguel Mora a partir de un diseño de Ipietoon para Free Blogger Template

Esta obra y su contenido están bajo una Licencia Creative Commons