En la vidriera de Dolce & Gabanna hay carteras pequeñas, de piel, a 800 euros. A unos metros, en la vereda, un marroquí vende unas idénticas por 15. Como las carteritas de dentro y las de fuera tienen el mismo color, el mismo diseño y el mismo logo, por la tarde llega la policía. En un mundo sensato meterían preso al vendedor que no tiene escrúpulos. En este mundo, en cambio, se llevan esposado al marroquí, por molestar a los nuevos ricos con una realidad escandalosa: el verdadero precio de las carteras.
Technorati Tags: frases, citas
4 Comentarios:
Je, que weno, es otra forma de verlo!
Menudas verdades quillo!
Es la verdad de la vida eso que comentas, a la cárcel el de la tienda.
Y es que sí, que descaro del marroquí :P:P:P:P:P
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.